Cuando una empresa de transporte activa un ERTE (Expediente de Regulación Temporal de Empleo) o un ERE (Expediente de Regulación de Empleo), surgen muchas dudas administrativas y legales.
Pero entre las más frecuentes, y también más desconocidas, está esta: ¿qué ocurre con la gestión del tacógrafo digital durante ese periodo?
La normativa no se detiene, incluso cuando la actividad se reduce o cesa temporalmente. Y una mala gestión en este contexto puede derivar en sanciones innecesarias.
En este artículo te explicamos cómo actuar ante un ERTE o ERE desde el punto de vista del tacógrafo, y cómo herramientas como TADIG pueden ayudarte a mantenerlo todo bajo control.
¿Se deben seguir descargando los datos del tacógrafo en un ERTE?
Depende del tipo de ERTE. Si el conductor no realiza ninguna actividad, porque su contrato está completamente suspendido, no se generan nuevos datos en la tarjeta ni en la unidad del vehículo.
Sin embargo, eso no significa que la empresa pueda despreocuparse por completo.
Según la normativa vigente (Reglamento (UE) n.º 165/2014), las tarjetas de conductor deben descargarse como mínimo cada 28 días, y la unidad de vehículo cada 90 días.
Esto sigue siendo obligatorio, salvo que exista un documento acreditativo del periodo de inactividad debidamente justificado.
Por tanto, si el conductor está en ERTE, lo recomendable es:
- Realizar una descarga previa de su tarjeta, para dejar constancia del último día trabajado.
- Documentar el periodo de inactividad con un certificado de empresa, y reflejarlo en los informes de actividad.
- Planificar la siguiente descarga antes de superar el plazo legal.
¿Y si el vehículo también está parado?
En caso de que los vehículos queden fuera de servicio por el mismo ERTE o por causas organizativas, es importante que:
- Se haga una descarga de unidad de vehículo antes del paro prolongado.
- Se archive esa descarga con una nota justificativa de la parada (puede incluir copia del ERTE).
- Se retome la descarga una vez que el vehículo vuelva a estar en uso.
Ojo: si los plazos de descarga se superan, aunque el vehículo no haya circulado, las autoridades podrían interpretar incumplimiento, si no se puede acreditar documentalmente el motivo de la inactividad.
¿Cómo justificar los días sin actividad en el tacógrafo?
Una de las dudas más habituales es qué aparece en los informes durante los días de ERTE.
La tarjeta del conductor registrará ausencia de actividad, pero los datos deben cuadrar con el registro general de la empresa.
Por eso es clave justificar correctamente:
- Que el conductor estaba fuera de servicio.
- Que no hubo conducción no registrada.
- Que los periodos de inactividad están correctamente reflejados.
Con TADIG, este proceso es mucho más sencillo. El sistema permite:
- Generar informes con los tramos de inactividad bien identificados.
- Asociar certificados o justificantes a cada jornada.
- Controlar los vencimientos y plazos de descarga, incluso aunque no haya movimiento.
- Mantener la trazabilidad legal de cada conductor, vehículo y jornada.
¿Qué pasa al reincorporarse tras un ERTE?
Cuando un conductor vuelve al trabajo después de un ERTE o una baja prolongada, es recomendable que:
- Se descargue la tarjeta antes de empezar la jornada.
- Se compruebe que los días de inactividad figuran correctamente.
- Se validen los turnos con el DDS (Sistema de Ayuda a la Toma de Decisiones del Conductor), como el que incluye TADIG, para garantizar que no hay errores acumulados ni descansos pendientes.
Recordemos que, si no se justifica bien un periodo sin conducción, la empresa puede ser sancionada por posible manipulación o por lagunas en los datos.
Lo más habitual es que se interprete como un uso indebido del tacógrafo o un intento de ocultar actividad, lo que implica multas elevadas y pérdida de puntos.
La importancia de la gestión digital incluso en la inactividad
Puede parecer que un periodo de inactividad no requiere gestión alguna. Pero en el mundo del transporte por carretera, lo que no se documenta, no existe. Y eso aplica también al tacógrafo.
Con herramientas como TADIG, las empresas pueden:
- Tener una visión centralizada de toda su flota y personal.
- Evitar olvidos, errores o descuidos que, en un control rutinario, se pueden convertir en una multa.
- Generar informes claros, trazables y listos para presentar ante una inspección.
Conclusión
Estar en un ERTE o un ERE no exime a la empresa de sus obligaciones legales en cuanto a la gestión del tacógrafo.
La clave está en actuar con previsión, justificar correctamente cada etapa y mantener los procesos bien documentados.
Con soluciones como TADIG, es posible mantener el control incluso en tiempos de incertidumbre, garantizando el cumplimiento normativo y evitando sanciones derivadas de una mala gestión de los datos.